INTRODUCCIÓN

Uno de los grandes problemas detectados en la educación ecuatoriana está vinculado al bajo desarrollo de habilidades sociales en niños, adolescentes y adultos (Paredes, 2022), por lo cual puede ser precursor del alto nivel de violencia en el sistema educativo (Mendoza & Maldonado, 2017). Frente a esto, unas de las principales causas de un bajo nivel de habilidades sociales es la pandemia por COVID-19, dado que la mayor parte de estudiantes de los diferentes niveles dejaron de relacionarse con sus compañeros de aula, por lo que trajo un retraimiento al momento de socializar con sus pares presencialmente (Pokhrel & Chhetri, 2021).

Por ende, las habilidades sociales corresponden a un conjunto de conductas emitidas por un individuo en un contexto interpersonal que expresa sus sentimientos, actitudes, deseos, opiniones o derechos, de un modo adecuado a la situación, respetando a los demás (Núñez et al., 2018). Existe una tendencia del poco desarrollo de dichas habilidades, cuya ausencia o limitación puede generar diferentes conflictos con otros, si bien no son habilidades con las que se nace, puede desarrollarlas a lo largo de la vida (Rojas, 2020).

El Ministerio de Educación (MINEDUC) ecuatoriano, en su necesidad de garantizar una educación de calidad y calidez, ha creado una Guía de Desarrollo Humano Integral para brindar igualdad de oportunidades a niños, niñas y adolescentes. En este sentido, dicha guía establece la necesidad de generar vínculos entre los diferentes miembros de la comunidad educativa con la finalidad de erradicar y prevenir la violencia con base en proyectos de vida (Ministerio de Educación, 2018).

Así mismo, la guía favorece la aplicación de metodologías activas destinadas a que el estudiante tome un rol activo en su aprendizaje, dejando atrás las metodologías tradicionales (Ministerio de Educación, 2018). Se habla de aprendizaje cooperativo, que es, en esencia, una metodología de corte activo en la cual los estudiantes desarrollan actividades de aprendizaje en pequeños grupos con miras a maximizar sus aprendizajes, favoreciendo cualitativamente el desarrollo de habilidades sociales (Pérez et al., 2022), permitiendo la interacción entre compañeros al generar nuevo aprendizaje (Maritza & Bustamante, 2021), de modo que requiere de la participación de varios agentes educativos, de igual forma se necesita de técnicas y recursos que servirán de apoyo para alcanzar los objetivos planteados por el equipo (García et al., 2019) .

Por tanto, la investigación toma relevancia dado que pretende determinar la relación existente entre las habilidades sociales y aprendizaje cooperativo en estudiantes de la básica superior de la Unidad Educativa PCEI CADBRIS, por encontrarse inmersos dentro del sistema educativo, quienes también se acogen a la modalidad integral propuesta por el MINEDUC. Además, al existir limitadas investigaciones en torno a la población joven y adulta, especialmente, es meritorio indagar la realidad de este segmento poblacional, cuyos resultados favorezcan a nuevas líneas investigativas en favor de dicha población. En este sentido se espera encontrar una correlación positiva entre las variables, y bajos niveles de habilidades sociales en los estudiantes.

MATERIALES Y MÉTODOS

Área de estudio. La investigación se realizó en la Unidad Educativa PCE CADVRISH, ubicado en la ciudad de Ambato, provincia Tungurahua, Ecuador. Creada con la finalidad de brindar beneficios del derecho a la educación, dado que permite que las personas que no culminaron su bachillerato lo realicen. Su modalidad es a distancia con jornada matutina y vespertina, al tomar en cuenta que quienes se encuentran en su establecimiento, corresponden a personas generalmente adultas. Tiene su misión de formar bachilleres líderes, con capacidad de emprendimiento a través de negocios o empresas propias, acompañados de valores éticos y morales que les permita ser verdaderos profesionales, con calidad humana (Unidad Educativa PCEI CADVRISH, 2023).

El grupo de interés corresponde a los estudiantes de básica superior de dicha unidad educativa por el hecho de corresponder a jóvenes y adultos que no han culminado su educación en modalidad normal, sino que buscan el culminar su bachillerato, por el hecho que no se aprecian estudios en este segmento poblacional además, la educación integral abarca a las instituciones educativas, como es la Unidad Educativa PCEI CADVRISH, que busca un desarrollo integral, como son las habilidades sociales, que no solo favorecen a la interacción entre compañeros, sino con la sociedad en general.

Metodología. La metodología utilizada fue un enfoque cuantitativo, a involucrar procesos sistemáticos que requieran la utilización de análisis estadísticos y datos numéricos (Hernández & Mendoza, 2018); de alcance descriptivo y correlacional, con diseño no experimental de corte transversal. Se aplicó dos instrumentos de evaluación. El primero corresponde al test de Habilidades Sociales (CHASO) desarrollado por (Caballo et al., 2017), cuyo objetivo es evaluar habilidades sociales de los adultos. Está compuesto de 40 preguntas con 5 opciones de respuesta tipo Likert que va de 1 muy poco característico de mí hasta 5 muy característico de mí. Además, evalúa 10 habilidades: 1) interactuar con desconocidos; 2) expresar sentimientos positivos; 3) afrontar las críticas; 4) interactuar con las personas que me atrae; 5) mantener la tranquilidad en situaciones embarazosas; 6) hablar en público/interactuar con superiores; 7) pedir aclaraciones a otra persona sobre su comportamiento hacia mí; 8) expresión de molestia, desagrado o enfado; 9) pedir disculpas; y 10) rechazar peticiones. Su confiabilidad es de α= 0,97 equivalente a adecuado (Cronbach, 1951).

El segundo instrumento, pertenece a la técnica de la encuesta, fue un cuestionario cuyo objetivo fue evaluar el aprendizaje cooperativo de los participantes. Se compone de 24 preguntas con 5 respuestas tipo Likert que va de 1 muy poco característico de mí hasta 5 muy característico de mí. que va de distribuidas en 6 dimensiones: 1) interdependencia positiva; 2) responsabilidad individual y de equipo; 3) interacción estimulada; 4) evaluación interna del grupo; 5) aprendizaje de habilidades sociales y 6) gestión interna del equipo. Cabe mencionar que la encuesta fue validada por expertos de la Universidad Técnica de Ambato.

Procedimiento de aplicación de la encuesta. El cuestionario CHASO y la encuesta sobre el Aprendizaje Cooperativo se aplicaron en la unidad educativa para que los estudiantes de forma presencial para que los estudiantes pudiesen responder los instrumentos. El tiempo empleado para el llenado de los instrumentos fue de treinta minutos por cada estudiante.

Participantes de la investigación. La investigación se realizó en la Unidad Educativa PCEI CADVRISH del cantón Ambato, direccionada hacia adolescentes y personas adultas que conforman la básica superior llegando a una población total de 100 estudiantes, seleccionados mediante un muestreo no probabilístico por conveniencia bajo criterios de inclusión: 1) Firma del consentimiento informado, 2) pertenecer a la Unidad Educativa PCEI CADVRISH, 3) Edad superior a 18 años, 4) Participación voluntaria; y criterios de exclusión:1) No firmar el consentimiento informado, 2) No estar matriculado en la Unidad Educativa PCEI CADVRISH, 3) Ser menor de edad y 4) No desear ser parte de la investigación. Por tanto, se obtuvo una muestra de 90 estudiantes con distribuidos en tres paralelos, modalidad semipresencial y a distancia, comprendidos en un rango de edad que oscila entre los 18 a 50 años, con predominancia de hombres (f= 51), seguido de mujeres (f= 43).

Análisis de datos. En el análisis descriptivo de la población se utilizó en la caracterización de la frecuencia y porcentaje del género de los participantes. Además de los totales de los instrumentos empleados. Así mismo, se analizó las dimensiones de los instrumentos mediante estadísticos descriptivos como media y desviación estándar.

Por otro lado, para el análisis correlacional entre las dimensiones de habilidades sociales y dimensiones del aprendizaje colaborativo se empleó Rho de Spearman (Maritza & Bustamante, 2021) el cual analiza la relación entre dos variables, así como la prueba Chi-Cuadrado (Hernández et al., 2017). Todos los análisis estadísticos fueron realizados con el software SPSS versión 3.4.1 (IBM, 2023).

RESULTADOS Y DISCUSIÓN

Análisis estadístico descriptivo de habilidades sociales y aprendizaje cooperativo. En esta sección se presentan los resultados obtenidos de la aplicación del instrumento de Habilidades Sociales mostró que existe una predominancia de moderadamente característico a mí (ver Tabla 1), indicativo de un nivel medio de habilidades sociales.

Gráfico 1. Nivel de habilidades sociales de los participantes

En relación a la encuesta de aprendizaje cooperativo, se apreció que la mayor parte de estudiantes, mostraron una predominancia de suficiente (ver Figura 2), indicativo de la presencia de aprendizaje significativo en este segmento poblacional

Gráfico 2. Nivel de aprendizaje corporativo

Los estadísticos descriptivos de las dimensiones de las habilidades sociales y aprendizaje cooperativo se encuentran en la Tabla 1.

VARIABLES	MEDIA	DESVIACIÓN ESTÁNDAR
DIMENSIONES DE HABILIDADES SOCIALES
Interactuar con desconocidos	2.31	1.024
Afrontar las críticas	3.10	.960
Mantener la tranquilidad en situaciones embarazosas	3.10	.780
Hablar en público/interactuar con superiores	2.89	.867
Expresión de molestia, desagrado o enfado	3.08	.902
Pedir disculpas	3.69	.932
Dimensiones de aprendizaje cooperativo
Interacción estimuladora	3.94	.839
Aprendizaje de habilidades sociales	3.93	.776
Responsabilidad en situaciones embarazosas	3.82	.894
Evaluación interna del grupo	4.08	.753
Interdependencia positiva	3.87	.796

Tabla 1. Dimensiones de las habilidades sociales y aprendizaje cooperativo

En la tabla se aprecia que en las dimensiones de habilidades sociales giran en torno a un nivel que va de poco característico para mí (puntaje 2) y moderadamente característico de mí (puntaje 3). Con puntaje más elevado en la dimensión pedir disculpas (M= 3.94) y más bajo en interactuar con desconocidos (M= 2.31). En cambio, en aprendizaje cooperativo se observa puntajes mayores en relación a las dimensiones de habilidades sociales, con énfasis en evaluación interna del grupo (M= 4.08) equivalente a suficiente, mientras que el más bajo corresponde a responsabilidad en situaciones embarazosas (M= 3.82) indicativo de un nivel algo o a veces.

Análisis estadístico correlacional. Se presenta las correlaciones entre las dimensiones del instrumento habilidades sociales y aprendizaje corporativo, obtenidos con la prueba Chi cuadrado y Rho de Spearman, previstas en la Tabla 1.

VARIABLES	DIMENSIONES APRENDIZAJE COOPERATIVO
VARIABLES	INTERACCIÓN ESTIMULADORA		APRENDIZAJE HABILIDADES SOCIALES		RESPONSABILIDAD INDIVIDUAL Y DE EQUIPO		GESTIÓN INTERNA DEL EQUIPO		EVALUACIÓN INTERNA DEL GRUPO		INTERDEPENDENCIA POSITIVA
Dimensiones Habilidades Sociales	X²	R²	X²	Rho Spearman	X²	Rho Spearman	X²	Rho Spearman	X²	Rho Spearman	X²	Rho Spearman
Interactuar con Desconocidos	10.75	.092	--	--	--	--	--	--	--	--	--	--
Afrontar las Críticas	--	--	8.421	.026	--	--	--	--	--	--	--	--
Mantener la Tranquilidad en Situaciones Embarazosas	--	--	--	--	13.170	0.173	--	--	--	--	--	--
Hablar en Público/interactuar con superiores	--	--	--	--	--	--	7.124	.060	--	--	--	--
Expresión de molestia, desagrado o enfado	--	--	--	--	--	--	--	--	9.093	.087	--	--
Pedir Disculpas	--	--	--	--	--	--	--	--	--	--	12.848	-.078

Tabla 1. Correlaciones entre dimensiones de habilidades sociales y aprendizaje cooperativo

En la tabla se aprecia que no existen correlaciones significativas entre las dimensiones de habilidades sociales y dimensiones del aprendizaje cooperativo, por ende, son variables que no se encuentran relacionadas entre sí, dado que los niveles de significancia son inferiores a 0.05. Tal es el caso, de la dimensión interactuar con desconocidos e interacción estimuladora, con nivel de significancia de 0,092 y rho de Spearman de 0.389, al igual que X2 = 10.75 (p= .823). Así mismo, sucede con afrontar críticas y aprendizaje en habilidades sociales con rho de Spearman de .026 (p= .811) y Chi Cuadrado de 8.421 con nivel de significancia de .751.

La dimensión mantener tranquilidad en situaciones embarazosas no muestra relación con responsabilidad individual y de equipo al tener un valor de rho Spearman 0.173 y nivel de significancia .103 y X2 = 13.170 con p valor de .357. De igual modo, no hay relación entre hablar en público/interactuar superiores y gestión interna del equipo con valor rho de Spearman .060 (p=.572) y X2= 7.124 (p=.802). Hecho que sucede de manera similar con expresión de molestia, desagrado o enfado y evaluación interna del grupo al tener un valor de rho de Spearman de .087 (p=.413) y X2= 9.093 (p=.695). Por último, no hay asociación entre pedir disculpas e interdependencia positiva al tener un valor de rho de Spearman de -.078 (p=.467) y X2= 12.848 (p=.380).

Por último, en orden a la relación entre habilidades sociales y aprendizaje cooperativo, la prueba Chi cuadrado denota que no existe relación alguna entre ambas variables, habilidades sociales y aprendizaje colaborativo.

Discusión. En relación a los resultados obtenidos del análisis estadístico, los estudiantes presentan un moderado nivel de habilidades sociales, que al compararlos con la literatura se denota la necesidad de un manejo de la interrelación en aula, que les permita adquirir mejores recursos de socialización y responsabilidad con el desarrollo interpersonal y social, sumado al aprendizaje (Luque et al., 2021).

Dicha información concuerda con el hecho que la educación antes ponía interés en la formación de competencias técnicas que el desarrollo de herramientas para las relaciones interpersonales y profesionales, donde la interacción con el otro es parte esencial del quehacer profesional (Mendo, 2019). Mientras que en aprendizaje colaborativo presentan un puntaje medio o regular, datos semejantes a la investigación de Luque et al. (2021) al hallar en los estudiantes un nivel regular de aprendizaje cooperativo, haciendo un llamado a los docentes para la utilización de estrategias colaborativas que favorezca el intercambio de contenido y conocimiento entre estudiantes y docentes, con énfasis en aulas con números estudiantes que interfiera en el cumplimiento de los objetivos institucionales.

De modo que el aprendizaje colaborativo juega un papel importante en el aula para fortalecer el aprendizaje propio y de los compañeros, requiriendo el desarrollo de habilidades sociales destinadas a una interacción social, positiva, de modo que hallaron una relación positiva en habilidades sociales con el aprendizaje cooperativo (Perlado et al., 2021). Así mismo, el estudio de Luque et al. (2021) halló correlación entre habilidades positivas y aprendizaje cooperativo. Datos que discrepan de la presente investigación al no hallar correlación entre las habilidades sociales y aprendizaje cooperativo, ni entre las dimensiones de dichos instrumentos.

Esto demuestra que pueden existir otras variables relacionadas con las habilidades sociales como las competencias parentales, puesto que la familia es el primer contacto social donde se transmiten normas, valores y formas de comportamiento, sumado al aprendizaje a relacionarse con los demás, encontrando una relación significativa entre competencias parentales y habilidades sociales (Pacheco & Osorno, 2021).

Por tanto, al encontrar un nivel poco característico de mí en interacción con desconocidos, se puede inferir que los estudiantes presentan dificultades para interactuar con desconocidos, posiblemente porque la educación no ha sido direccionada a mejorar las habilidades sociales en niveles inferiores de educación, pero al tratarse de una población que pretende culminar su escolaridad hasta el bachillerato, es probable que existan alumnos con edad adulta cursando niveles de educación básica, es decir, la primaria, limitando una estimulación temprana. Tal como lo expone Varela y Mustaca (2021) en su estudio, los estudiantes con nivel educativo alto mostraron un mejor puntaje en habilidades sociales en relación a los de menor nivel educativo, de modo que consideran que el nivel educativo se convierte en predictor de un mejor manejo de habilidades sociales (Salazar et al., 2020).

Los datos reflejan un nivel moderado de aceptación ante las críticas relacionadas a la educación, las críticas constructivas pueden ayudar a mejorar aspectos educativos, con énfasis en el rendimiento académico, lo cual se relaciona con los aprendizajes de habilidades sociales e interacciones sociales adecuadas (Arévalo et al., 2021).

Por otro lado, denotan un nivel regular de hablar en público e interactuar con sus superiores, elementos necesarios para desenvolverse en la sociedad. El hecho de una falta de habilidad para hablar en público puede conllevar diversas alteraciones en el estudiante, una de las consecuencias es en el contexto académico, como exámenes y presentaciones orales, incidencia en el rendimiento académico, aparecimiento de sintomatología ansiosa, entre otros (Bravo et al., 2021).

En relación a las dimensiones del aprendizaje colaborativo se encontró niveles regulares en responsabilidad en situaciones embarazosas, denotando que no existe una facilidad por reconocer su actuar ante circunstancias que puede generar vergüenza, siendo una emoción básica del ser humano (Greenberg, 2014), por ende, pueden tener una tendencia a excusarse frente a los errores cometidos, posiblemente porque así no habrá consecuencias contra ellos

CONCLUSIONES

En base a los análisis realizados y en orden al cumplimiento del objetivo general, se apreció que los estudiantes presentan un nivel moderado de habilidades sociales y regulares de aprendizaje cooperativo, denotando el requerimiento de atención integral en la educación que contribuya al fortalecimiento de dichas variables.

Por tanto, no se encontró una relación estadísticamente significativa entre las habilidades sociales y el aprendizaje cooperativo en los estudiantes de la básica superior de la Unidad Educativa PCEI CADVRISH, ni tampoco entre las dimensiones de ambas variables.

Es así que el estudio presenta algunas limitaciones, como la indagación de variables familiares que permita realizar correlaciones con las habilidades sociales como el caso del tipo de familia, número de cargas familiares, o personales como el estado civil, que otorgue mayores análisis correlacionales. No se realizó comparaciones entre los participantes para determinar quienes poseen los niveles más bajos tanto en habilidades sociales como aprendizaje colaborativo, de modo que se abren nuevas líneas de investigación.

En base a los hallazgos, se recomienda evaluar otras variables como competencias parentales para determinar la presencia de relación entre habilidades sociales y estilo de crianza. Así mismo, se sugiere realizar estudios similares en otras instituciones educativas a distancia, con similar población, para comparar resultados.

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